Si en Alemania no hay Walmart, es básicamente debido a la cultura y las leyes existentes en el país europeo, así como a las peculiaridades de su mercado.
¿Por qué Alemania tiene leyes que no permiten el éxito de Walmart en su mercado? Esto es debido al duro golpe que el ingreso de esta cadena representó al comercio local, fenómeno que ha tenido lugar también en muchos otros territorios donde la marca opera.
Además, Alemania se distingue por fabricar productos de primera calidad en prácticamente todas las ramas de la industria. Fomentando el consumo interno, se fortalece la industria local, además de que la llegada de Walmart y su gama de productos de bajo costo contribuiría a reducir los estándares de calidad establecidos en el mercado alemán.
Hoy en día Alemania ha aportado al mundo marcas como Siemens, Bosch, Porsche, Volkswagen, y Playmobil. Además, cuenta con sus propias marcas de comestibles, muchas de las cuales son prácticamente de consumo interno, e inclusive la gaseosa local Fritz Cola es más popular allá que la Coca-Cola. Este tipo de productos gozan de la aceptación generalizada de los alemanes, cosa que dificultó la extrapolación del modelo de negocio de Walmart a ese mercado.
Por si fuera poco, se encuentra la política laboral. En Alemania la productividad es alta debido a la arraigada cultura de eficiencia, responsabilidad y ética laboral, por lo que algunas políticas de la multinacional Walmart a ese respecto serían disfuncionales o malinterpretadas, por lo que le prohibieron la instalación de su línea telefónica para reportar “faltas al reglamento” por parte de los empleados. También, Walmart utiliza personas de la tercera edad para algunas actividades, como las de empacador voluntario, lo cual sería ilegal en aquel país. También se le impidió prohibir las relaciones amorosas entre empleados; todas estas políticas provocaron el debate público en los medios, lo cual creó una mala imagen a la cadena ante los consumidores.
Por último, aunque quizá con mayor relevancia, en Alemania es ilegal el bumping (es decir, vender por debajo del costo para atraer clientes), práctica históricamente realizada por la cadena de Sam Walton.
Walmart intentó durante 12 años colocarse en el mercado alemán, tras los cuales, según se calcula, perdió 3 mil millones de euros. Por esas razones en Alemania no hay Walmart.
