Es cierto que los osos comen miel, y no sólo producto de la imaginación de los creativos de la televisión y el cine. Este singular y muy famoso gusto por este alimento, para saciar el cual se ven obligados a lidiar con enjambres enteros de abejas, se debe a que de hecho su piel y pelambre les protege de las picaduras y a que, a pesar de que mucha gente no lo sabe, los osos también comen abejas, o más bien dicho larvas de abeja, las cuales les resultan deliciosas. Es decir, los osos comen miel, pero no están ahí por ésta precisamente, al menos no de manera exclusiva, sino más bien por las larvas de abeja que ahí se encuentran.
Los osos comen miel, pero son omnívoros
En realidad, los osos pardos son animales omnívoros, es decir, son capaces de alimentarse prácticamente de todo; comen por igual a otros mamíferos que plantas o pescado, así que su dieta es bastante amplia y balanceada. Son capaces también, por ejemplo, de subir trepando a las copas de los árboles con el fin de bajar frutos o incluso comer las propias hojas. Incluso, durante el otoño, los osos acostumbran alimentarse de bellotas de roble.