Beety Boop está considerada como uno de los principales personajes animados de todos los tiempos. Creada por Max Fleischer y Grim Natwick, su peculiar aspecto está basado en el estilo de vestir de las chicas flapper de los años ’20, y sus rasgos faciales en los de la cantante norteamericana Helen Kane.
Betty debutó en una animación publicada por Fleischer Studios en 1930 (Dizzy Dishes), que parodiaba a Kane presentándola con una voz chillona y orejas de perro estilo Droopy. El personaje tuvo éxito y dos años después fue modificado convirtiéndose humanizándolo mucho más, y convirtiendo las orejas de perro en pendientes. La caricatura terminó siendo tan popular que Paramount comenzó a brindarle más apoyo que a la propia Helen Kane, cuya carrera y trascendencia histórica terminaron siendo eclipsadas por Betty Boop.
Se piensa que en el cortometraje de 1932, Minnie the Moocher, el personaje termina de consolidarse como un símbolo sexual, gracias a los cambios originados por las ideas creativas de Dave Fleischer, hermano de Max:
Betty Boop en Minnie the Moocher (1932). The Public Domain Review
Betty Boop se convirtió en el primer dibujo animado en la historia en representar a una “mujer sexual”, con características tales como un cuerpo de mujer real (poco habitual en la animación de su tiempo), ataviado con ligueros y escotes, sin mencionar que muchas de sus escenas contenían elementos tales como bailes eróticos, exposición de ropa interior o personajes tratando de espiarla mientras se cambiaba.
En 1934, Helen Kane demandó al estudio por apropiación indebida y competencia desleal, perdiendo el juicio luego de dos años de litigio.
La llegada de Betty Boop coincidió con la caída en la popularidad del flapper, cuyo mayor esplendor había sido en los ’20. La Gran Depresión había destruido ese estilo de vida, basado en la extravagancia, y Kane fue menos requerida por los productores conforme avanzaba la década de los ’30. Aunque su popularidad experimentó un resurgimiento durante los ’50, Helen Kane nunca pudo igualar la fama de la caricatura basada en ella. Murió el 26 de septiembre de 1966 en Queens, New York.
Beety Boop, mientras tanto, se mantuvo vigente y popular, y sus derechos han pasado a manos de numerosas compañías como resultado de ventas y fusiones corporativas.