Aunque se manejan varias versiones acerca del origen del apodo del cómico mexicano Mario Moreno “Cantinflas” (incluyendo una, sostenida por Carlos Monsiváis, que refiere a que el poppular apelativo es producto de la unión de los vocablos “cantina” e “inflas”), la versión más reconocida es la que sostenía el propio Moreno, quien narraba que el pseudónimo había sido una creación -propia- al azar, buscando que sus padres y familia no se enteraran que se encontraba trabajando en el medio del espectáculo. Esta versión fue dada a conocer pública y personalmente por el artista.
