Dentro de la Unidad Infonavit Iztacalco, ubicada en Iztacalco, México D.F., existió un impresionante lago artificial, que era una de las características y orgullos de los habitantes de dicho condominio.
Desgraciadamente, desapareció tras el terremoto ocurrido el 14 de marzo de 1979 (popularmente conocido como el Terremoto de la Iberoamericana, ya que causó el colapso de las instalaciones de la Universidad llamada así). Luego del sismo, que tuvo una magnitud de 7.6, el lago artificial (donde por cierto habitaban patos y peces), se secó por completo en menos de 24 horas a raíz de un agrietamiento. Tiempo más tarde, el área fue rehabilitada para convertirse en un parque. Existe el rumor de que el lago desapareció tras el famoso sismo del 19 de septiembre de 1985, pero para entonces el lago ya tenía 6 años de haber desaparecido.
A pesar de que se trata de un atractivo poco habitual en una ciudad como la capital mexicana, quedan pocos registros audiovisuales o formales de la existencia del lago, cuya existencia casi se ha convertido en un mito urbano, incluso para quienes habitan dentro de las 35 hectáreas de la famosa Unidad Habitacional, que fueron expropiadas por el Presidente Adolfo López Mateos en 1962, para comenzar la construcción del complejo 10 años más tarde.
