Mucha gente alrededor del mundo conoce perfectamente el chile cuaresmeño, quizá mayormente famoso por el nombre de chile jalapeño. Es una de las muchas variedades de chile que se utilizan en la cocina, sobre todo en la gastronomía mexicana. Esto se debe a que es una variante del Capsicup anuum, especie del género angioesperma Capsicum, que es originaria de la región que hoy es América Latina. Se le llama jalapeño porque la ciudad veracruzana de Xalapa, Veracruz, es tradicionalmente la principal productora de este vegetal en el mundo.
Sin embargo, se sabe que la palabra cuaresmeño no proviene de la misma región de México, sino más bien del llamado Altiplano Central (la Ciudad de México y sus alrededores). Supuestamente este chile fue denominado cuaresmeño debido a que la gastronomía local solía emplearlo durante la cuaresma, época del año en que, según la tradición del catolicismo (religión predominante en México desde la colonización española) está prohibido el consumo de carne, por lo que los creyentes se ven obligados a buscar alternativas alimenticias durante esa temporada.
De tal manera, estos chiles habrían sido consumidos en estas fechas rellenos de queso y otros alimentos, lo cual provocó que se les asociara determinantemente con el período de cuaresma.