Siendo un movimiento social y político que presume estar basado en la búsqueda de la equidad de género en la sociedad, el feminismo tiene un nombre que podría confundir a la gente sobre su verdadera esencia y doctrina, que en teoría busca suprimir los patrones de género, favorables al hombre, con los que durante siglos funcionó la humanidad.
Aunque el nombre pueda engañar a mucha gente, no se trata de lo opuesto al machismo, ya que éste es concebido como una teoría de inferioridad, en el que la mujer debe supeditarse al hombre. El feminismo, en cambio, es un movimiento que busca establecer la igualdad en derechos y libertades, partiendo de la premisa de que la mujer se encuentra en una posición de subyugación y discriminación por el simple hecho de haber nacido como tal.
Si bien es cierto que una buena parte de la desigualdad que prevaleció durante siglos, en detrimento del reconocimiento de los derechos de la mujer, ha desaparecido, el feminismo continúa existiendo y reivindicándose como tal.
La genealogía del movimiento feminista se ha establecido así:
- Feminismo de la primera ola: el que tuvo su origen durante el período de la Ilustración, inspirado en la filosofía crítica de autores como Rosseau, y que tuvo manifestación en Inglaterra y Estados Unidos durante el siglo XIX y principios del siglo XX. De este período destaca el texto de la británica Mary Wollstonecraft, llamado Vindicación de los derechos de la mujer, y como logros principales pueden atribuírsele las primeras exigencias sólidas de derecho al sufragio y la primera convención sobre los derechos de la mujer en Seneca Falls, New York, en 1848. Se basó en vindicaciones de jure (de derecho), exigiendo el avance hacia una mayor igualdad ante la ley.
- Feminismo de segunda ola: alude al movimiento de la década de los ’60 y ’70 en los Estados Unidos. Sus exigencias incluyeron las vindicaciones de facto, es decir, la opresión no reconocida oficialmente sobre las mujeres, como el tema reproductivo, sexual, familiar y laboral, habiendo puesto en la mesa por primera vez el tema del aborto legalizado, el cual que continúa siendo sumamente polémico. Durante este período, el gobierno de John F. Kennedy utilizó como principal herramienta discursiva a la mujer y realizó acciones para abrir la discusión acerca de la equidad de género. Este feminismo perdió fuerza a principios de la década de los ’80.
- Feminismo de la tercera ola: el que inició en la década de los ’90. Rescata elementos la llamada Teoría queer, que sostiene que las identidades sexuales y géneros son una construcción social arquetípica y científicamente creada, de forma ajena a la biología y buscando que el sexo no se apegue a los códigos morales. Rompe con la concepción de la mujer concebida en la segunda ola, considerablemente basada en el perfil de las mujeres norteamericanas de clase media alta y por primera vez vuelve hacia el tema de la transfobia.
Algunas posiciones del feminismo han ocasionado que su movimiento choque con otros, tal como sucedió con la comunidad feminista lésbica, misma que llegó a llamar homofóbico al feminismo debido a que éste trataba al lesbianismo como un tema independiente y ajeno a la liberación de la mujer.
Si bien es cierto que el movimiento ha sido criticado por muchas cosas, entre ellas el llamarse feminismo (nombre que podría sugerir que se basa exclusivamente en defender a las mujeres sobre los hombres), quienes esgrimen su bandera han optado seguir utilizando ese nombre, descartando el uso de otro término que a simple vista aluda a la equidad.