La inquietante historia de A Clockwork Orange, conocida en español como Naranja Mecánica, es mundialmente famosa, probablemente más por la película de Stanley Kubrick que por la novela distópica del británico Anthony Burgess.
¿Pero por qué fue bautizada así? Hay varias versiones sobre esto.
El propio Burgess dijo que el título viene de la expresión As queer as a clockwork orange, que quiere decir “tan raro como una naranja de relojería”, una vieja expresión de los habitantes de los bajos fondos londinenses. Sin embargo, hay otras hipótesis, la más notable apunta a que el título en realidad iba a ser, o de forma velada es, “The Clockwork orang”. El vocablo orang, que quiere decir persona, es de origen malayo, idioma que Burgess dominaba ya que radicó en Malasia.
Entonces el título sería un juego de palabras, y en realidad significaría “El Hombre Mecánico”, en alusión al condicionamiento mental (técnica Ludovico) aplicado en la novela a la persona del protagonista, Alex. Así, programado cual máquina u “hombre mecánico”, el personaje perdería su capacidad para ejercer la violencia.
La novela ha resultado sumamente polémica desde siempre, y también la versión cinematográfica de Stanley Kubrick, que fue objeto de censura prácticamente en todos los territorios, debido a su alto contenido violento y sexual.