Durante muchos años, los cigarros Faros fueron considerados la marca de bajo costo más importante de México. Surgieron en la ciudad guanajuatense de Irapuato, aparentemente durante 1918, aunque hay versiones que sostienen que ya existían desde los inicios de la Revolución Mexicana en 1910. Gracias a su bajo costo, los Faros lograron una rápida popularidad a inicios del siglo XX, y han permanecido por muchas décadas en el mercado, arraigándose de una manera poco común.
La influencia de los cigarros Faros en la cultura popular de México ha sido amplia. Durante muchos años se les ha tomado como un símbolo de las clases sociales bajas en el país, llegando incluso a aparecer en frases populares, como:
“Ay, Farito, ni que fueras Lucky Strike”
Esta última frase hace alusión al carácter barato de los cigarros Faros en contraste con sus similares de la famosa marca americana de cigarros, Lucky Strike. También se le asocia con la famosa frase “Ya chupó Faros”, que supuestamente alude a que durante la Revolución Mexicana, los soldados que iban a ser fusilados pedían un Faro como última voluntad, o bien se les daba a fumar un Faro. Actualmente, la importante marca de cigarros Faros, que atravesó por un considerable declive en sus ventas en los años ’90, pertenece a la empresa Cigatam.