Lídice era un pueblo en la extinta Checoslovaquia, que durante la ocupación nazi de ese país fue completamente destruido, y la mayoría de su población asesinada por las tropas alemanas.
Esto ocurrió en represalia por el atentado contra el líder del nacionalsocialismo y general de las SS, Reinhard Heydrich a manos de una célula de la resistencia checa, entrenada en Gran Bretaña, el 27 de mayo de 1942. Heydrich se encontraba en ese país como su gobernador, o “protector” según la terminología nazi. Moriría días después tras infectársele las heridas producidas por el estallido de una granada que fue lanzada a su vehículo.
Como una de las represalias más importantes ordenadas por Hitler ante el atentado que costó la vida a uno de sus más leales y eficientes colaboradores, se ordenó la destrucción de los poblados de Lídice y Ležáky, de donde provenían numerosos partisanos que se encontraban luchando contra la ocupación alemana en el país.
Así, el 10 de junio de 1942 Lídice fue completamente destruida, y simultáneamente filmada una película que registró la devastación del pueblo. 340 habitantes de Lídice fueron asesinados, sumando sus nombres a la cuota de casi 1, 500 personas que perdieron la vida en Checoslovaquia como represalia por la muerte de Heiydrich.
En 1949 comenzó la reconstrucción de Lídice en un área contigua a la que ocupó el pueblo original, y varias regiones alrededor del mundo adoptaron el nombre del pueblo martirizado.