Los soldados chinos llevan un alfiler en el cuello como una herramienta para mantener la cabeza erguida y no bajarla en ningún momento. Este castigo corporal es una de muchas estrategias utilizadas durante el entrenamiento de los jóvenes reclutas, con el fin de corregir su postura y buscar que tengan un buen porte como militares, y en épocas posteriores, cuando están en servicio, muchos soldados siguen empleándola en eventos públicos.
Las fotografías de soldados chinos con alfileres clavados debajo del cuello de sus ropas han recorrido el mundo, y se han vuelto virales en las redes sociales abriendo nuevamente el debate acerca de las estrictas políticas de Estado de este país comunista.
No es la primera vez que el ejército chino es tachado de utilizar fuertes medidas correctivas de esta índole.