El cáncer es una de las enfermedades más letales que existen, pero llama la atención el hecho de que no exista el cáncer de corazón. Esto es debido a dos características del corazón, que lo hacen resistente a las mutaciones que dan origen al cáncer, llevadas a cabo durante los procesos de división celular.
La primera característica que diferencía al corazón de otros órganos donde sí se desarrolla el cáncer es que las células cardiacas no se replican, su división celular es casi inexistente, por ello es casi imposible que se den mutaciones.
La segunda es que el corazón, a diferencia de otros órganos y tejidos del cuerpo, se encuentra prácticamente a salvo de sustancias carcinógenas y de otros factores como podrían ser el tabaquismo o los rayos ultravioleta, que se han establecido como factores que aumentan el riesgo de padecer esta enfermedad.
