El estado norteamericano de Nuevo México (New Mexico) lleva ese nombre debido a que fue conquistado originalmente por los españoles, que llegaron a él en el siglo XVI. El primer líder expedicionario europeo en arribar al territorio fue Francisco Vázquez de Coronado, en el año 1563. Los españoles, al encontrar ahí establecidas a diversas comunidades de nativos americanos (principalmente navajos, pueblo y apaches), pensaron que tenían parecido con los indígenas de la cultura mexica, por lo que la zona fue denominada Nuevo México.
La región formó parte del Virreinato, teniendo comunicación con la capital, Ciudad de México, gracias al Camino Real de Tierra Adentro, una impresionante vía de comunicación que iniciaba al norte en Santa Fe, Nuevo México, llegando hasta la capital mexicana en un recorrido superior a los 2500 kilómetros.
Al convertirse México en una República independiente, libre del dominio español, Nuevo México formó parte de este país durante 12 años, hasta que la guerra de intervención estadounidense le arrebató la soberanía de este territorio, el cual pasó a formar parte de los Estados Unidos con el Tratado de Guadalupe Hidalgo, firmado por el Presidente Manuel de la Peña y Peña, con el gobierno norteamericano.
Hasta la fecha, el escudo de Nuevo México continúa haciendo alusión al país vecino del sur (y con dos de cuyos estados colinda), ya que junto al águila americana cuenta con la imagen del Escudo Nacional mexicano: el águila parada en un nopal devorando una serpiente.