El señor, el niño y el burro es un cuento que muchos recordamos por haber aparecido durante muchas generaciones en el ibro de Español Lecturas Segundo Grado de la SEP. Se trata de un cuento muy entrañable para la mayoría de los que lo leímos y nos deja una gran enseñanza. Así que aquí te explicamos El señor, el niño y el burro en pocas líneas:
El mensaje o moraleja que nos deja este cuento es muy sencillo de entender, y gira en torno a la idea de que la gente siempre suele criticar a los demás sin importar lo que hagan. En el cuento podemos ver al señor, el niño y el burro transitando por el camino, y pasando frente a cuatro grupos de personas. En un principio el señor viene montado sobre el burro, la gente lo critica porque el niño viene caminando mientras él está cómodamente instalado sobre el animal.
Entonces el señor decide bajarse del burro y le pide al niño que se suba. De este modo vuelven a pasar junto a un grupo de personas, que ahora critican porque el muchacho viene sentado en el burro dejando que el señor camine. Entonces ambos se bajan y cuando vuelven a pasar frente a un grupo de gente, ahora son criticados por no utilizar el burro e ir ambos caminando. De modo que finalmente deciden subirse los dos, y cuando pasan frente a otro grupo de personas vuelven a ser criticados, ahora por abusar del burro yendo los dos montados en él.
El cuento cierra con la sentencia del señor: “¿Ya ves, hijo? No hay que hacer mucho caso de lo que diga la gente”. Y justamente esta es la moraleja del cuento, que siempre habrá críticas destructivas sin importar lo que se haga, “la gente nunca está contenta” y que lo mejor es hacer lo que uno considere correcto y adecuado sin que esto sea determinado por la opinión de los demás.
En el video se puede apreciar el cuento completo desde las páginas del libro de Español Lecturas Segundo Grado de la SEP, mismo que es uno de los más buscados y entrañables por quienes hoy en día coleccionan las viejas ediciones de la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos.